El texto que mostramos a continuación es parte de ese informe "oculto" sobre el campo de golf que Armando García ha escamoteado a los vecinos durante años.
Se nos ha negado una copia para poder mostrarlo integro a aquellos que lo pagaron ( todos los vecinos de Navaluenga.)
En dicho informe se recogen múltiples irregularidades, coincidentes con las que venimos denunciando desde 2003.
La negligencia de el alcalde de Navaluenga a la hora de controlar la gestión de un bien municipal, como es el campo de golf, constituye una evidente dejación de funciones, agravada por la ocultación de la información que nos hubiera permitido poner coto a la estafa que hemos sufrido todos los vecinos de Navaluenga.
13 años de opacidad manifiesta nos hacen sospechar de cierta complicidad entre los responsables del ayuntamiento y los golf-os de la pretendida fundación sin animo de lucro, que se lucraron con la gestión de unas instalaciones municipales sin que un solo euro revertiese a la caja común.
200 millones de pesetas costo el campo de golf ( el presupuesto de un año de nuestro ayuntamiento), 200 millones puestos a disposición de unos "amiguetes" de Valladolid, que han resultado ser unos estafadores.
INFORME SOBRE LA GESTIÓN DEL CAMPO DE GOLF DE NAVALUENGA.
CONCLUSIONES:
La gestión de unas instalaciones deportivas requiere de un
presupuesto anual de explotación, documento ineludible del que carece “a priori”
el campo.
En los once años que ha durado la concesión administrativa,
no consta el pago de cannon (12.000 €) de explotación alguno, lo cual solo
puede obedecer al NO CUMPLIMIENTO del convenio por parte de la empresa
concesionaria (FUNDACIÓN SIN ANIMO DE LUCRO) o que durante todos estos años el
campo no ha generado beneficio alguno. Esto último en líneas generales parece
no ser cierto.
En ese mismo periodo no existe constancia documental de
contabilidad oficial.
De los datos analizados se deduce que el supuesto gerente
del campo percibía a modo de honorarios cantidades variables que oscilan entre
los 60.000 € y 14.000 € en el último periodo.
Así mismo existen gastos y movimientos bancarios sin
justificar.
Por tanto se puede decir que estos desembolsos a modo de
sueldo, tanto dinerario como en especie
y teniendo en cuenta que había otro personal que suplía la gerencia se podrían haber
imputado directamente como beneficio.
Por otro lado, no se conoce ni un solo apunte contable de
inversión en maquinaria y red de riego, solo reparaciones o pequeño material.
No parece que se haya realizado ningún plan de
mantenimiento, ni preventivo ni correctivo.
Como ya hemos dicho no sabemos si existe contabilidad
oficial; por tanto tampoco podemos saber si en los bienes de equipo se realizo
la amortización contable de las maquinas y equipos de riego (10 años).
También podemos deducir que no existen planes de prevención de
riesgos laborales, reconocimiento médico ni entrega de equipos de protección a
los empleados del campo.
Estos datos revelan que el gestor anterior (FUNDACION GOLF
CASTILLA Y LEÓN) ha llevado al campo de golf al “Cementerio de los Elefantes”,
lo cual quiere decir que se ha exprimido (sin inversión alguna) todas sus
facultades hasta un punto tan crítico que su rentabilidad esta muy mermada y es
necesario como condición “sine cuanum” la reinversión de parte de los
beneficios, tanto en maquinaria, red de riego, instalaciones, casa club… etc.
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