Venta de alcohol a menores en el pueblo

Distintas personas me han comentado que el super "chino" que ha cerrado sus puertas hace unos días, fue denunciado por la venta de alcohol a menores.

Aparentemente, la realizó el padre de un chaval que había sufrido un coma etílico.

No puedo confirmar este rumor, pero tampoco creo que sea importante hacerlo, porque durante todo el verano he visto a grupos de chavales tomando alcohol junto a este local; en realidad tampoco importa conocer la edad exacta de los chicos, porque el problema es más amplio, y tampoco se resuelve con señalar a un establecimiento en particular*.

Otras personas me dicen que no es el único sitio.

En fin, no creo que sea muy trascendente hurgar en esta cuestión.

El problema es el modelo que se ha promovido "institucionalmente", porque mientras que la única alternativa que proponga el pueblo, sea la del "turismo de desmadre" y el "tachin, tachin, tachin", siempre habrá gente dispuesta a vender alcohol y drogas; la crisis agudiza este problema y vuelve más tentadoras estas vulneraciones a la ley. 

Muchas veces analizamos las cosas de forma fragmentaria: " Mira, esos chinos que vendían a los chavales", o "...el camello ese, el sobrino del...", o "...en aquella otra tienda también...".

Esa forma de analizar las cosas, es funcional al modelo instaurado, porque al apuntar sobre las consecuencias coyunturales, y no sobre las causas estructurales y "fundantes", dejamos de interpelar al poder local, que es el responsable de años de desidia, ausencia de proyectos alternativos y desgobierno.

El problema es más complejo y poliédrico, porque se trata de promover actividades que motiven a los chavales y les incline a volcarse en cuestiones culturales*, deportivas y asociativas-muy importantes en estos tiempos, sobre todo las solidarias-, y en promover otro modelo turístico, y en legislar y controlar ciertos excesos que se dan en determinados establecimientos; todo esto lleva tiempo y compromiso, y no vale el "siga, siga", el "todo pasa" y el "hago como que me importa".

Nada se ha hecho hasta ahora, y creo que es un buen momento para comenzar a debatir estas cuestiones.

En fin, antes de acabar, quiero manifestarles algo sobre la línea editorial que mantiene este blog sobre esta cuestión: Nos preocupa que se nos vea como unos "mojigatos" que se alarman ante el esparcimiento de los chavales; nada más alejado de nuestra actitud; seguramente tenemos un talante flexible y liberal, pero eso no significa que dejemos de  denunciar la utilización de los jóvenes y el estrechamiento de "mundos" a que se les aboca con el modelo imperante, y con la codicia de algunos; nos importa la convivencia en una comunidad donde no se destruyan los lazos, y/o  las formas de sociabilidad que este pueblo se ha dado.

Cuando algunos políticos acuden puntualmente a la "tradicional" procesión de turno o proclaman determinados valores, no deben olvidar que esos gestos deben verse reflejados en políticas concretas y no en vacuas actuaciones que solo buscan cumplir con el "guión" asignado.



Gonzalo Quiroga.

*Tampoco importa saber cuantos chicos tenían la edad "por los pelos", si se les había colado algún menor, u lo que fuere; repito, el problema es otro.

* En otro artículo hemos hablado de la programación cultural del verano, de la suspensión del curso de teatro para los niños, etc; pero otra muestra de la desidia y del abandono en esta materia, es la biblioteca municipal; en ese lugar encontramos amontonados algunos libros sin ningún orden ni articulación, y por supuesto, no hay ninguna persona encargada; una parte importante del material muchas bibliotecas proviene de las donaciones: ¿ Como se gestiona este tema en nuestra biblioteca?.
Las bibliotecas actuales, aparte de los libros tradicionales, ofrecen películas, discos, etc; en fin, solo hace falta pasarse por un pueblo que tenga una buena biblioteca y una buena programación, para ver lo que le puede aportar a los chavales en su etapa de formación.