Páginas

lunes, 27 de agosto de 2012

Otra mirada desde fuera


Otro de mis amigos de Estocolmo (que ha estado aquí cinco veces en los últimos doce años) ha contestado a mi pregunta de qué es lo que más le gusta de Navaluenga. Dice esto:

Primero pienso en los paisajes tan magníficos, en la montaña, los árboles, las vistas, los olores...También estoy muy a gusto en el pueblo, sobre todo cuando no hay demasiada gente. Me gusta oír hablar el castellano, tomar vino, pasear. Recuerdo también con agrado las viejas casas de piedra, además de algunas casas más nuevas...

Cuando tenga tiempo de contestarme mi hermana, seguramente ella también dirá algo por el estilo.

Creo que estas sencillas palabras reflejan una forma de viajar, de hacer turismo, que personalmente es la que me parece interesante: se disfruta de ver otro lugar, pero un lugar donde hay gente que vive, trabaja, come, crea, que se relacionan los unos con los otros – no un parque temático, creado para que los turistas consuman ocio dejando su dinero allí.

Es posible que la gente que hace turismo de esta manera proporcionan menos beneficios a algunos negocios, pero a cambio no necesitan que se gaste dinero público en programas específicos para turistas, y no hay intereses opuestos respecto a los de los habitantes.


 
(Lena)

No hay comentarios:

Publicar un comentario