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sábado, 23 de agosto de 2014

Una noche de "teatro".




Esta noche, en Navaluenga, fui a ver teatro, y lo más importante: me "creí" que estaba viendo una obra de teatro.

Se lo vuelvo a repetir:

Año 2014, Navaluenga:

Durante la noche nos dirigimos a un espacio tan frío y tan poco propicio para la representación teatral, como un polideportivo, y ante alrededor de "ciento cincuenta personas", un grupo de chicos de este pueblo nos bendijo con una representación teatral de verdad, y con "mucha verdad".

Tan bien resultó, y tan integrados nos sentimos todos los presentes, que estoy seguro que muchos nos preguntamos: ¿ Por qué no hacemos más teatro en nuestro pueblo?, pero prefiero desarrollar este tema en otro artículo, y centrarme en lo vivido ayer.

Desde el primer instante, lograron sumergirnos a todos en el devenir de su representación, y no nos soltaron hasta el final.

No se imaginan lo difícil que es lograr esto, y lo complicado que resulta entretener y hacer reír a la gente.

La comedia de enredos del "novel" escritor teatral navalongueño,  Daniel San Miguel, inquiere, con gran inteligencia y picardía, sobre una serie de tópicos vinculados a nuestra cultura, y sobre todo a nuestra cultura rural; y los actores logran transmitirnos el texto con tal vivacidad y gracia, que no solo nos reímos y vibramos a lo largo de toda la obra, si no que también, muchos nos "emocionamos".

A pesar de que la historia que nos cuentan sucede hace cien años, el autor supo inquirir con mucha sutileza y gracia sobre algunos prejuicios, y algunas dinámicas sociales, y hasta políticas, de los pueblos, que son muy actuales; creo que hoy más que nunca, resultan muy necesarias este tipo de reflexiones sobre el mundo rural, así que aliento al autor para que insista sobre este derrotero.

Estos jóvenes valientes, que, aunque muchos no se hayan enterado,  no son actores profesionales, y residen  lejos de nuestro pueblo, han dedicado dos meses de su tiempo y de su verano, para ensayar y pulir una obra cuyos beneficios destinaron a una institución tan necesaria-y en estos tiempos, aún más-, como Fundaben.

Durante estos días pude ver como estaban involucrados en la obra, y como bregaban por solucionar todas las cuestiones logísticas, publicitarias y de escenografía, pero aún así, nunca me hubiese esperado presenciar una obra tan compacta y tan bien trabada como la que presencié.

Cuando me dirigía a ver lo obra, lo hacía con la gratitud que se debe a una pandilla de amigos, que se iba a esforzar por sacar adelante una representación teatral, que probablemente, presumía, estaría más o menos bien, aunque se descociese por algunos costados, y cuyos beneficios iban destinados a una noble causa.


Que "pardillo" que fui al no percatarme del grado de capacidad de superación,  y la profesionalidad de "esta pandilla",  y cuanto tengo que aprender del talento y entrega de estos chicos, porque yo no me acerqué para "darles una mano" y un poco de apoyo, si no que fueron ellos los que nos regalaron una noche mágica a todos los que presenciamos la obra.





Mañana, cuando acabe con esta particular reseña, quizás  escriba que tuve un extraño sueño nocturno, donde uno hijos de Navaluenga*, regresaban a su pueblo en  una noche de verano, y de diferentes maneras, nos daban una lección a "todos".





Gonzalo( 21-8-14).

* Cuando uno sueña, se puede permitir todo, también ser un poco cursi.

* No quiero olvidarme que algunos de los actores provienen de otros pueblos de la zona, como Navalmoral de la Sierra.


Fotos: M. Martos.


6 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo con este post, la obra estuvo por encima de toda expectativa imaginable. Ayer nos dieron una lección de superación y entusiasmo y es que en esta vida todos los días se aprende algo nuevo. Por ello enhorabuena a los actores y todos los que la hicieron posible

    un veraneante de Madrid

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  2. Montserrat Alonso Velasco21 de agosto de 2014, 16:14

    Realmente nos sorprendieron a todos estuvieron geniales.

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  3. Destacar el afán de superación, el derroche de imaginación y esfuerzo ...de estos jóvenes atrevidos, irreverentes y talentosos. "CHAPO"

    I.R.C.

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  4. Ahora que tenemos las fotos, estaría bien que alguien haga una sinopsis de la obra-quizás Daniel- , y una labor crítica sobre la misma.

    Gonzalo.

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  5. ¿Que podría decir? ¿Que me ha trasladado a otro tiempo?...¿que he soñado? Todo junto y sobre todo porque quienes interpretaron no creían más que en la ilusión, ni siquiera sospechaban de su talento...ni tantos otros...pero ahí están y así estuvieron ¡FANTÁSTICOS! Quizás todavía se nos despierte una pequeña esperanza al pensar que existen jóvenes que han hecho lo que han querido, que se han dirigido ellos,han creado y que se han permitido ser altruistas solo porque sí. ¡Un gran aplauso a los siete!
    Cristina Pérez Garcés

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  6. https://soundcloud.com/ser-12/teatro-navaluenga

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