Esta semana está seco, aunque con surcos (que cada vez son más profundos) - no porque alguien haya arreglado las cunetas, sino simplemente porque estos días el agua de la sierra transcurre por otros lados.
Como expliqué en mi entrada el 25 de junio, ya en verano hablé con el Alcalde del problema, sin que eso surtiera efecto.
Ayer presenté una solicitud escrita en el ayuntamiento. Las empleadas allí me recibieron muy amablemente, lo que es importante y que agradezco. Sin embargo, el que tiene que ocuparse (según parece) de todos estos asuntos pequeños y grandes que siempre surgen es el Alcalde. Que estaba en Avila, y que sigue sin tener una hora fija de atención a los vecinos.
(Lena)
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ResponderEliminar...no te creo Lena, es imposible que nuestro alcalde no haya estado en su despacho, y haya dejado de cumplir con su "dedicación exclusiva", el tiene "super-poderes" que le transmitió nuestro genial, enriquecido por azar, y magnánimo, don agustín, "el chirriquitín"; y sobre sus prerrogativas, el debe versar sobre lo divino y lo humano, por algo está en la comisión sobre santa teresa y se ocupa de llamarme al orden cuando ingreso a la cancha de futbol de "su"polideportivo, tan suyo, que se encaprichó con unas gradas enormes, y se le olvidó el gimnasio.
ResponderEliminarAhora en serio, señor alcalde, ojo con los modales, que aunque algunos intentamos ser personas educadas, conocemos nuestros derechos y "sus límites"- deje de ver westerns, usted no es el sheriff, más bien es de los otros-, y como dice una zamba, "si somos toritos en nuestro corral, devenimos torazos en corral ajeno", ahora saque la guitarra y ensaye.
Gonzalo Quiroga.