Los ciclos políticos cambian - o, mejor, "las etiquetas políticas cambian"-, pero el extractivismo, la sojización compulsiva, la deuda externa, la expulsión de los habitantes del medio rural hacia las grandes urbes, el clientelismo perverso, etc, no varían.
Que traición a la soberanía nacional y a los propios ideales progresistas, la de Dilma, Cristina o Néstor, que traición la de estos gobiernos corruptos a la soberanía alimentaria y al entorno natural de sus países, ¿porque?, díganme, que diferencia existe con el gobierno de Macri, ¿qué cambia para Monsanto?, y el dominio de las grandes multinacionales cerealeras y de la alimentación, ¡díganme!, donde encuentran ustedes la diferencia.
Con Jorge, por quién tengo un respeto y una lealtad infinita, tenemos miradas diferentes sobre los partidos políticos emergentes en Europa que pretenden representar a las grandes mayorías populares, y puedo entender su escepticismo basado en algunos motivos que no expondré en esta sintética introducción.
Lo entiendo, pero yo no estaría en Podemos si pensase que abraza las mismas políticas que estos gobiernos, y, en fin, están claras las políticas de Podemos con respecto al TTIP, los transgénicos, los "mundos" rurales, o la deuda.
No dejen de escuchar este programa esclarecedor sobre la frustración monumental que representa el fracaso de los "llamados" gobiernos progresistas en Brasil u Argentina:
http://ar.ivoox.com/es/horizonte-sur-2016-1-abril-audios-mp3_rf_11013730_1.html
Gonzalo Quiroga Arzeno (VECINOS/Podemos Ávila)
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